Y Alexander cogió su guitarra

Hacía tiempo que, abriendo comentario, no ofrecíamos nada de El Diario Vasco. Hace unos días encontramos la muy bien llevada y dura historia de los ucranianos Alexander y Denis. 

Arantxa Aldaz nos cuenta algunas claves: "Nos llamaron la víspera del reportaje a la sección para avisarnos de la situación de estos dos marineros. Obviamente, no dudamos ni un segundo en cerrar la cita. Acudimos el fotógrafo José Usoz y yo, junto con el inspector del sindicato que se cita en el reportaje y quien había tratado con los dos ucranianos durante los últimos cuatro meses. Estuvimos casi un par de horas en el barco, pero en cuanto llegamos y abrieron la puerta del barco, supimos que estábamos ante una buena, y a la vez cruel historia". 

"El recibimiento fue algo frío: la barrera del idioma, nuestra presencia 'extraña' en el barco… Lo conté al inicio del reportaje porque me parecía que ese aislamiento podía explicar sin matices su dura situación y, además, me servía como entradilla para enganchar el resto de la historia. Desde el principio pensé en cerrar el reportaje con el momento en que Alexander, el mayor de los dos marineros, cogió su guitarra y nos cantó una canción de su país".

"He de reconocer que ha sido una de las historias que más me han impactado. Primero, por saber que a dos pasos de casa tenemos situaciones injustas que también hay que denunciar y segundo, porque de nuevo fui consciente del privilegiado papel que tenemos los periodistas para ser testigos y luego transmisores de historias que, desgraciadamente, suelen permanecer ocultas".