Nos parece una idea estupenda. Estar atento a exámenes, a oposiciones... Porque a veces, al ver en qué consisten las pruebas, hay sorpresas y, claro, excelentes oportunidades para hacer buen periodismo. Esta página de Diario de Navarra es una fantástica prueba: qué se pide a los aspirantes a bomberos. Algún medallista olímpico tendría problemas...
Laura Puy nos cuenta detalles de esta página: "La idea del reportaje surgió en la reunión del equipo de sucesos y tribunales (Nacho Calvo, Gabriel González y yo) después de que publicáramos que Interior había aplazado la oposición a bombero por unos recursos de aspirantes femeninas, que criticaban la dureza de las pruebas físicas en comparación a ediciones anteriores. Nos preguntamos que el lector podía querer saber cuáles eran esas exigencias. La comparación de las marcas exigidas unos años y otros podía ofrecer la respuesta, pero creímos que para el lector sería más claro que deportistas o expertos muy ligados a los deportes de la oposición analizaran si los máximos pedidos (a los que aspira todo opositor) eran o no viables, es decir, si consideraban exigentes las pruebas".
"Determinamos que ese análisis debían hacerlo personas totalmente desligadas a la oposición, de ahí que en el reportaje hablen dos deportistas navarros conocidos (el atleta Antonio Echeverría y el nadador Javier Urtasun para las pruebas de fondo y natación) y un preparador físico (Daniel Jiménez, monitor de gimnasio y licenciado en Ciencias de la Actividad Física y Deporte). El resultado fue que la opinión de los tres coincidió: las pruebas parecían ideadas para superatletas. Pensado ya el reportaje, había que plasmar un montón de números en el papel, sobre todo porque queríamos que se viera cómo difiere la exigencia pedida para los bomberos en comparación a los policías".
"Y plasmarlos fue el trabajo de Alberto Erro. El objetivo principal del gráfico era presentar la avalancha de datos, cinco pruebas, tres cuerpos, dos sexos, varios valores... de una manera más visual y breve. Todos los datos en un estadillo de texto habría sido texto rodeando texto y sólo disponíamos de una página. El recurso de sustituir bomberos, policías forales, policías municipales, no apto, apto, máximo, masculino y femenino por logos está muy manido pero nos sirvió para aligerar la página de letras y aportarle color y un cómodo reconocimiento visual. Además, la descripción de las distintas pruebas sin la aportación de un dibujo habría sido mucho más complicada de entender para un lector profano".
Laura Puy nos cuenta detalles de esta página: "La idea del reportaje surgió en la reunión del equipo de sucesos y tribunales (Nacho Calvo, Gabriel González y yo) después de que publicáramos que Interior había aplazado la oposición a bombero por unos recursos de aspirantes femeninas, que criticaban la dureza de las pruebas físicas en comparación a ediciones anteriores. Nos preguntamos que el lector podía querer saber cuáles eran esas exigencias. La comparación de las marcas exigidas unos años y otros podía ofrecer la respuesta, pero creímos que para el lector sería más claro que deportistas o expertos muy ligados a los deportes de la oposición analizaran si los máximos pedidos (a los que aspira todo opositor) eran o no viables, es decir, si consideraban exigentes las pruebas".
"Determinamos que ese análisis debían hacerlo personas totalmente desligadas a la oposición, de ahí que en el reportaje hablen dos deportistas navarros conocidos (el atleta Antonio Echeverría y el nadador Javier Urtasun para las pruebas de fondo y natación) y un preparador físico (Daniel Jiménez, monitor de gimnasio y licenciado en Ciencias de la Actividad Física y Deporte). El resultado fue que la opinión de los tres coincidió: las pruebas parecían ideadas para superatletas. Pensado ya el reportaje, había que plasmar un montón de números en el papel, sobre todo porque queríamos que se viera cómo difiere la exigencia pedida para los bomberos en comparación a los policías".
"Y plasmarlos fue el trabajo de Alberto Erro. El objetivo principal del gráfico era presentar la avalancha de datos, cinco pruebas, tres cuerpos, dos sexos, varios valores... de una manera más visual y breve. Todos los datos en un estadillo de texto habría sido texto rodeando texto y sólo disponíamos de una página. El recurso de sustituir bomberos, policías forales, policías municipales, no apto, apto, máximo, masculino y femenino por logos está muy manido pero nos sirvió para aligerar la página de letras y aportarle color y un cómodo reconocimiento visual. Además, la descripción de las distintas pruebas sin la aportación de un dibujo habría sido mucho más complicada de entender para un lector profano".
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