Seguimos apostando —lo haremos hasta el último día de existencia de este blog— por las historias. No sólo porque suelen estar mejor escritas que el resto del diario; sobre todo, porque hablan de personas. Descrubrirlas a veces cuesta —quizá menos de lo que parece—, pero siempre gana el diario con ellas. Hemos leído unas cuentas últimamente:
Por ejemplo, gracias a La Voz de Galicia hemos sabido más de Julián Bernal, el abuelo del atletismo gallego. También leímos la historia en Diario de Burgos. Aunque Julián vivía desde los año cincuenta en Ferrol, había nacido en Burgos.
Por ejemplo, gracias a La Voz de Galicia hemos sabido más de Julián Bernal, el abuelo del atletismo gallego. También leímos la historia en Diario de Burgos. Aunque Julián vivía desde los año cincuenta en Ferrol, había nacido en Burgos.

También es edificante la que encontramos hace unos días en Diari de Tarragona, centrada en Maite Leal, que se jugó el tipo por salvar a un vecino atrapado en un incendio:



Y también de Sur, la generosidad de Juan Fernández. Nos la cuenta Carmen Martín:


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