Jaume Capdevila Herrero es Kap, que en la actualidad firma sus excelentes ilustraciones en
La Vanguardia y
El Mundo Deportivo. Se estrenó como profesional del chiste —"o sea, publiqué y cobré mi primer dibujito"— en 1994 en el semanario de información política
El Triangle, con el que aún colabora. En el 96 comenzó a dibujar caricaturas en
La Vanguardia, concretamente en la sección 'El Burladero', una página satírica semanal. Un año más tarde ya publicaba un chiste diario durante el mes de agosto. Ese mismo año empezó a dibujar en
El Mundo Deportivo.
"Como no puedo evitar liarme —nos cuenta—, me he dedicado también a montar exposiciones en las que reivindico el papel de los dibujantes y caricaturistas de prensa (Trazos, 2006; Muntañola, 2006; Tísner, 2007), y artículos de prensa o libros en los que quiero hacer divulgación del humor gráfico (Trazos, 2006; Señor director, 2007; Bagaría, 2007; Tísner, 2009; Canya al Borbó!, 2009).
Kap es licenciado en Bellas Artes por la Universitat de Barcelona. Y realizó un Curs d'Aptitud Pedagògica en la Universitat Politècnica de Catalunya.
EL CUESTIONARIO
¿Qué peculiaridades adornan a un ilustrador que trabaja en un medio de comunicación?
Para empezar, yo no me considero ilustrador sino humorista gráfico (o dibujante satírico, o "ninotaire" que decimos en mi tierra, que vendría a ser garabatero o dibujante de monos), pues me interesa más la calidad textual (en eso quiero referirme al contenido de la viñeta, que puede ser perfectamente sin palabras) que la estética (que es un valor añadido), siempre utilizando las herramientas que son el humor o la sátira para interpretar la realidad. Por lo tanto, que quede claro que el ilustrador de prensa y el chistógrafo son fauna diferente, aunque del mismo plumaje. A pesar de ello, he realizado mucha ilustración para mis periódicos, sobre todo haciendo caricaturas.
Respondiendo a la pregunta, un ilustrador en un medio de comunicación debe ser rápido y bueno (en éste orden). Se puede suplir lo de ser "bueno" siendo efectista (vía fácil), o imprimiendo un fuerte carácter (vía difícil) en cada una de las ilustraciones.
¿Cree necesaria una formación periodística para su trabajo diario?
Cualquier tipo de formación que uno reciba es buena. Incluso la formación periodística. Pero no es imprescindible.
¿Qué aporta la ilustración a un artículo, noticia, entrevista..? Convénzanos para que contratemos a un ilustrador para nuestra publicación.
La ilustración es, en primer lugar imagen, y los medios dan cada vez más importancia a la imagen. La mayoría de la prensa escrita aún no se ha dado cuenta que uno de los recursos que le son propios y exclusivos es la imagen dibujada: ilustración, caricatura y chiste encuentran su medio ideal en el papel de periódico, y muy pocos medios han descubierto que es un valor añadido muy importante incluir imágenes dibujadas.
¿Por qué? Primero, aportan originalidad y exclusividad: hoy que el 80% del material de los periódicos proviene de las mismas agencias, cada dos por tres coinciden en el uso de fotos; nunca pasará eso si usas un dibujo. Luego, son una apuesta por la calidad: un dibujo siempre es arte, y su autor un artista, con todo lo que esta etiqueta comporta. Incorpora niveles de lectura: un dibujo contiene un sinfín de calidades subjetivas e interpretativas, no digo mayores que cualquier fotografía, pero podría decirlo, pues el dibujo contiene (o puede contener, o debería contener) más recursos semánticos, retóricos, metonímicos, metalingüísticos o alegóricos.
¿Cómo es una jornada de trabajo? ¿Cómo se enfrenta a la hoja en blanco?
Mi jornada de trabajo, como yo mismo, es absolutamente caótica, dentro de un orden. Normalmente soy más productivo por las tardes, que es cuando pienso los chistes y los dibujo; por la mañana cargo las pilas a base de leer la prensa, o hacer partes más mecánicas del trabajo.
Ídolos, inspiraciones, influencias.
Yo es que soy muy abierto. Cada libro que leo, cada película, o cada cuadro que miro, modifica un poco mi visión del mundo, me aporta algo. Perich, Cesc, Quino, Gin, Chumy Chúmez, Searle, Hirschfeld, Sábat, Palomo, K-Hito, Bagaría, Gus Bofa, Vázquez de Sola, Raf, Mulatier, Krüger, Fer, Ricardo, Gallego & Rey, Guillermo, Toni Batllori, Miquel Ferreres, Alfredo, Crist, Desclozeaux, Sorel, Max, Trog, Ibáñez, Franquin, Steve Bell, Steadman, Scarfe, T.T. Heine, Bon, Karl Arnold, Thelwell, Siné, Muntañola, Fougasse, Uderzo, Daumier, y por supuesto, Picasso, Cezánne, Matisse, Klee, Klimt, Goya, Velázquez, De Martín, Tolouse Lautrec... (Ah, y Woody Allen, Groucho Marx, Billy Wilder, Lubitsch, Kubrik...).
Sus cuatro trabajos de los que esté más orgulloso y por qué.
Esto es muy difícil. Trabajar a diario para la prensa comporta un ritmo de trabajo y producción altísimo. Y a pesar de que el día que sea hayas hecho un dibujo o una viñeta genial, al día siguiente debes hacer otra, y al siguiente otra, y otra... Además, en esto de la prensa, el factor oportunidad es tan importante como el de la calidad: no basta con publicar una buena viñeta, hay que publicarla el día adecuado (no tres semanas más tarde). O sea que un chiste que en su contexto puede ser fabulosamente extraordinario, fuera de él (o sea, dos días después), puede pasar a ser un chiste, normal, o incluso, mediocre, malo o ininteligible.
Por lo tanto, me lo tomo con distancia y tranquilidad. Soy muy crítico con mi propio trabajo, y los dibujos de hace unos años ahora mismo no me gustan nada. Supongo que los que hago ahora, no ve va a gustar dentro de unos años... Por otro lado, como creador, pongo el mismo empeño en dar en cada una de las obras que hago lo mejor de mi mismo (o de lo que dispongo en ese momento), por lo que me cuesta tener favoritismos entre mis creaciones. A lo que íbamos ¿cuatro trabajos de los que esté orgulloso? Difícil.
Para empezar, y ya que mi meta diaria es intentar conseguir que el chiste de hoy sea un poco mejor que el de ayer, pues te pongo el último que he publicado en La Vanguardia. Creo que es una buena viñeta: igual no te tronchas de risa, pero en una imagen, más o menos caricaturesca, creo haber sintetizado una situación política compleja. Pero claro, la semana que viene, espero que esta me guste menos que la próxima que dibuje...
En siguiente lugar, elijo una viñeta que tiene un montón de años, apareció en mi primer libro de viñetas de 1997, y he comprobado, en exposiciones, encuentros, etc. que es un dibujo que gusta mucho en general. Como creo que el dibujante de chistes en realidad solo hace la mitad del trabajo, y el lector, al interpretar la viñeta y reflexionar sobre su contenido, hace la otra mitad, pues con esta elección tengo en cuenta a esa otra mitad.
Luego pongo una caricatura de Ronaldinho, en la que invertí muchas horas, y disfruté como un enano. Ensuciarse los dedos a base de pinturas es una de las gozadas de mi trabajo. La caricatura también es una interpretación de la realidad, pero requiere un esfuerzo distinto al del chiste. La distorsión de la realidad que uno dibuja en las caricaturas provienen de un trabajo de análisis y síntesis anterior.
Y para terminar, pues... un chiste de humor negro, un tipo de humor que me interesa mucho (por influencia de Chumy, Perich, Siné, Goya, Max Ernst y tantos otros), que no tiene mucha salida comercial (no me imagino publicando cosas así en los grandes medios) pero me interesa pues a parte de la extrema distorsión estética hacia lo grotesco y deforme que permiten este tipo de dibujos, en el fondo permite una reflexión (normalmente dura) sobre la propia condición humana, sus limitaciones y ridiculeces al enfrentarlos con las situaciones más extremas (muertes, violencia, enfermedad y cosa así), que son las que toca el humor negro.
Kap recibió el 14 de marzo el premio Gat Perich. Le vemos con Andreu Buenafuente (izq.).